Recordé morir. Recordé la muerte.
Recordé dejarme morir hasta los huesos,
porque… porque no son míos.
Recordé amar la muerte, porque ella me
trae a la vida; desde un nuevo lugar; desde un nuevo sentir; desde un insight
lleno de matices. Desde una gran sensualidad que a veces apretada, puja por
salir a horcajadas, al no encontrar la veda que la apaña.
Amé morir, amé sentirla mi amiga; la
que a la izquierda de mi ser, a cada palmo de distancia me acompaña y me
susurra, “recuérdame, aquí estoy para que vivas, para que disfrutes tu
existencia, para que sepas lo que es abrazar la vida con cada bocanada…”
Y la respiro... ¡Ahh! y me dejo envolver
en su aliento fétido, cálido y quejumbroso, porque satisfecha cumple con ese
ciclo, a la cual fue designada, (amorosa, puntual y apropiadamente), aunque a la
mayoría le parezca apestoso, grotesco, y de poca gracia.
Amo a la muerte amiga, que me brinda el
vacío propicio para llenarme de mi misma, de este nuevo ser que nace tras cada
muerte conciente.
Amo morir y dejar morir lo que ya no me
pertenece, lo que ya no lo elijo, lo que se transforma y me trasciende.
¡Querida Muerte; has sido difamada al
cumplir tu rol tan solemnemente. Pero ahora también sé, que ya no es mi causa
temerte, ni defenderte, siquiera lamentarme porque no te entienden…
Querida Muerte; sé que estás para quienes
aceptamos la Vida
más allá de lo que los ojos pretenden cerciorar, conceptualizar y
amarrar.
Bienvenida Muerte amiga, porque tu me
haces abrazar la Vida
llena de Magia!
¡¡¡Disfrútenla!!!
Me encuentro en silencio, he cerrado las
ventanas…
Hora de morir, de elegir que quiero en mi vida, y que deseo liberar,
hacia una nueva esencia de ser...
Respiro profundo
Respiro conciente de
quien soy
Respiro mi existencia
Respiro mi ser en
su totalidad,
recuerdo recorrer con cada respiración la
planta de mis pies, subiendo por las pantorrillas, abriéndome paso con cada
respiración a sentirme plena, a sentirme real en esta realidad,
Y me reviso,
Y me siento,
Y disfruto cada
respiración que llena mi barriga, subiendo; bajando,
Y me regocijo en mi ser,
porque me sé más allá de este cuerpo, y de esta mente, (que osa hacerme creer
que me guía en este momento)...
Y sigo respirando, sabiendo que voy a
morir, que me dejo morir, y elijo morir.
¡¡¡Que morir es Libertad!!!
Que puedo morir porque lo
elijo, sin dejar mi ser, sin dejar mi cuerpo.
Que elijo morir las limitaciones,
que elijo morir los dolores, las tristezas, las angustias, las emociones que me
engañan...
Dejo morir los fantasmas de antaño, las penurias que ni recuerdo,
los pecados que no he creado, ni las culpa que no son mías.
Dejo morir toda
carencia de alegría, de entusiasmo, de falta de pasión, y de vana fantasía...
Dejo morir...
me dejo morir confiada,
mientras respiro, mientras elijo respirarme en este morir conciente, en esta
nueva alquimia.
Confío, y respiro, y suelto, y muero, y
ah! suelto el aliento último de cualquier vestigio de lo que me frene, de lo
que intente siquiera hacerme sombra ante este inminente renacer...
Y respiro, inhalo, y exhalo, e inhalo y
exhalo, y muero, y río, e inhalo, y vuelvo a respirarme, mientras nazco a mi
misma, me doy vida, soy mi propio portal,
Yo Soy mi propio portal, ante, durante
y después de cada muerte conciente, porque me elijo, me acepto y confío en este
renacer,
Respiro este nuevo ser, que vacío me
convida a llenarlo de amor, de alegría, pasión, y de sensualidad... ¡ahh!
Inhalo ahmyo en mis días de ahora en más, y exhalo, cualquier resto energético estancado
Me inhalo en una danza plena, sin
palabras,
Me inhalo y me exhalo con claridad,
Me abro a recibirme, a ser, a cumplirme a
mi misma, a regocijarme ante la totalidad de que quien yo Soy,
Y me recuerdo, "Yo Existo, más allá de mi
cuerpo y de mi mente" ...
Y me recuerdo disfrutarme en plena sensualidad
expansiva, porque, ¡Yo Soy La experiencia expansiva en pleno reconocimiento alado!
Morir y dejar morir
soltar lo que limita, encierra, y
esclaviza
Morir y dejar morir es una milenaria
fórmula alquímica,
una fórmula codiciada y por muchos tergiversada, y
para su resguardo, fue oculta por Magos y Maestros (como la mayoría de los
simples secretos), así lograr perdurar hasta estos tiempos, sin necesidad
de ser enterrada, (una gran ironía y chiste cósmico para acceder a la vida, a la Real Vida llena de magia )
Morir Conciente, es Permitir el Infinito
Lorena 14/04/18
No hay comentarios:
Publicar un comentario